*Imagen: Adrià Costa

Entrevistamos a la Fundación Impulsa para conocer como ayudan a estudiantes con pocos recursos

La Fundación Impulsa, arraigada en Osona, acompaña y ayuda a estudiantes que finalizan la secundaria a continuar su formación. El 95% del alumnado que becan acaban los estudios, el 62% continúa estudiando un grado superior y el 71% consigue trabajo después de finalizar la beca. La Fundación Impulsa, patrocinada por el Grupo Gepork, aporta valor social y permite a muchas personas formarse profesionalmente. Hablamos con la Fundación Impulsa para saber de primera mano como realizan su tarea.

Cómo definiríais la actividad de la Fundación Impulsa?

El nombre Impulsa define los objetivos de la Fundación: dar impulso a personas con talento y ganas de aprender, pero con dificultades socioeconómicas, para seguir sus estudios. Así mismo, dar impulso a la Formación profesional, ya que garantiza encontrar un puesto de trabajo estable y muy calificado.

Cómo se hace el acompañamiento al alumnado?

Primeramente, a cada estudiante se le empareja con una persona que asumirá su mentoría durante toda su formación. La segunda línea de actuación, son las cuatro sesiones grupales donde el alumnado participa a lo largo del curso. Las sesiones grupales son con el resto de personas becadas por La Fundación, y es el espacio donde se aprende competencias transversales a través de dinámicas orientadas al trabajo en valores, la educación emocional y el crecimiento personal. Por último, la tercera línea es el equipo psicológico con que cuenta la Fundación Impulsa, son quien velan por los alumnos y su bienestar en todo el proceso de acompañamiento, así como velan por las relaciones que se establecen con la mentoría.

Cómo funciona la mentoría?

Quien asume una mentoría es una persona voluntaria que, en sesiones periódicas, acompaña y hace reflexionar al alumno durante su proceso de aprendizaje. Es una persona con capacidad de atención, analítica, comprensiva y estimulante que intenta transmitir estas características al alumnado y se preocupa por su evolución académica. También tiene que dejar que el alumnado aprenda de su propio error, tiene que sugerir e invitar a pensar: no dirigir o decir qué tiene que hacer.

Qué herramientas proporcionáis al alumnado para acceder a los ciclos de Formación Profesional?

La beca “Ayuda a la Formación Profesional” consiste en ayuda económica para poder realizar los estudios, un ordenador portátil, el acceso en el programa de mentoría, sesiones de trabajo de competencias transversales y el acceso a una bolsa exclusiva de ofertas de trabajo. La beca implica el compromiso moral de devolver la ayuda de la Fundación, si es posible, para que otros estudiantes en la misma situación puedan recibir el mismo apoyo.

Qué criterios se usan para seleccionar las personas que se becarán?

Se tienen que pasar tres filtros. Primero, cada centro de educación secundaria hace una propuesta de 3 estudiantes que consideran merecedores de esta beca. Después, el Consell Comarcal realizó una segunda fase. Finalmente, es la misma Fundación quien decide qué personas, de las restantes, acceden a la beca. Se valora la situación económica y criterios más subjetivos como el grado de motivación o el riesgo de abandono.